top of page

7 TIPS PARA CUIDAR TU ENERGÍA CADA DÍA DURANTE TU PROCESO ONCOLÓGICO.


7 tips para cuidar tu energía cada día durante tu proceso oncológico


Llega el momento de introducir en tu ajetreado día citas médicas, pruebas, emociones que se detonan con fuerza, pensamientos que te paralizan, hacerte a la idea de lo que te espera, incertidumbre porque no tienes ni idea, juicios, culpa, disimulo... Y en este tremendo caos donde todo tu mundo conocido se desmorona, nos olvidamos de nosotros.


Lo sé porque sentí como todo eso pasaba por encima de mí, me desbordaba, me revolcaba como una ola gigante y mi única idea era que todo siguiera igual, no desordenar la vida de nadie, que buscaran un sustituto para mi trabajo, que mis hijos estuvieran atendidos que mi pareja... ¿Y yo? ¿Dónde quedaba yo?


Este proceso va de nosotros y nos coloca en el centro de todo este lío. Cuando entendí que todo eso que yo pretendía sostener no me correspondía, que habría momentos en los que yo no estaría disponible y que me iba a dar el permiso de que eso sucediera, comprendí la importancia de cuidar de mi energía. Te ocupas de cargar el móvil para poder utilizarlo más tiempo, de poner carburante al vehículo para poder disponer de él, tú eres el motor de tu vida y ¿no cuidas tu energía?


Parece algo lógico y básico, sin embargo no reparamos en ello. Aquí te comparto 7 tips para cuidar tu energía cada día durante tu proceso oncológico que me han funcionado.



Tip #1 - Hablarnos de forma amable.

Háblate bonito. Dedícate palabras amables y cariñosas.

Te has parado a escuchar cómo te hablas, muchas veces nos tratamos mal, nos hacemos de menos, pequeñitos, no nos damos valor o andamos culpándonos. Es algo que suele pasar desapercibido porque es broma, no pasa nada... ¿Le dirías eso a tu mejor amiga? Acompáñate en estos momentos como lo harías con ella, con alguien a quien quieras mucho.


Conviértete en tu mejor aliado.

Es un proceso nuevo, aunque no sea la primera vez, es nuevo porque cambiamos y no somos la misma persona que ayer. Estás aprendiendo a relacionarte con tu proceso, con lo que conlleva, con palabras impronunciables, con emociones desbocadas, con preguntas sin respuesta...háblate bonito.


Tip #2 - Tomar pequeñas pausas para respirar profundo.

Ese momento en el que el mundo para y retomas el aliento y la fuerza para continuar. Cuando paras y tomas una respiración profunda, le das a tu mente la oportunidad de cortar el pensamiento que tenía y abrir un espacio para que puedas elegir uno que te sea más útil en esta situación, en este instante, uno que te ayude a sostenerte o a impulsarte.

<<Cada instante es un momento nuevo que te da la oportunidad para que tú elijas cómo actuar>>. - Mario Alonso Puig

Tip #3 - Rodearnos de belleza.

Es algo que nos eleva la vibración de forma sutil, nos hace sentirnos más ligeros y también merecedores.

Observa tu espacio, los objetos de tu entorno, la ropa que te pones, dónde te sirves la comida. Es una oportunidad para mimarnos, para regalarnos atención, para recordarnos que somos más que la enfermedad, no dejes que sea ella quien tome ahora las riendas de tu vida, es algo transitorio, aunque no sepamos el final, elígete y eleva tu vibración decidiendo de forma consciente rodearte de belleza.



Tip #4 - Compartir con personas que nos hagan sentir bien y con quienes podamos ser nosotros mismos.

Hay muchas formas de nutrirnos y, en estos momentos, vamos a acudir a todas las que podamos. Nutrir nuestro cuerpo físico sí y también mental, emocional y energético, de manera que vamos a ser selectivos y cuidar muy bien a qué lugares vamos, dónde nos exponemos, qué conversaciones tenemos y con quién nos compartimos.

Es momento de estar con personas con las que nos sintamos seguros, que podamos ser nosotros mismos y soltar las armaduras que tanto empiezan a pesar para poder cargarnos de risas, de palabras y conversaciones que nos eleven, nos inspiren, nos hagan sentir que estamos vivas y disfrutar del momento presente.

Por supuesto también para compartir nuestras inquietudes y mostrarnos vulnerables, crear un entorno seguro en el que poder ser y expresarnos sin sentirnos juzgados.



Tip #5 - Acudir a lugares que realmente queremos ir.

Nuestra agenda se ha llenado de citas médicas, días de tratamiento, pruebas, así como en tu día antes estaba llena de "obligaciones" y "quehaceres" que nos mantenían tan enredados en esa realidad que no encontrábamos un momento para colocar algo que realmente nos conectara con nuestra esencia, nos ayudará a reconectar, a cargar las pilas.


Este es un buen momento para abrir espacio físico y mental a todo eso.


¿Cuántas cosas has estado postergando?

Piensa en esos lugares que tienes cerca que pueden servirte para tomar un respiro, para desconectar de todo el ruido externo de esas situaciones y te permitan conectar contigo.


Cuando empiezas a introducir en tu día a día estos tips comienzas a escuchar a tu cuerpo, a tu intuición, y podrás guiarte por ella. Si sientes que no quieres acudir a algún lugar, comunícalo de forma asertiva y clara, no te obligues. Si has de acudir porque es algo ineludible, la invitación es a observar qué sensación te causa, qué emoción te está generando y conectar con una intención o un para qué mayor que eleve tu vibración.


Tip #6- Sonreír.

La sonrisa es muy poderosa. Cuando sonreímos se activan unos músculos en el rostro, hacen a nuestro cerebro generar una bioquímica que le indica a nuestro cuerpo que todo está bien, que estamos a salvo.


Hace poco escuché a alguien decir que se activa por supervivencia y me sentí muy identificada con ello puesto que desde el principio de mi proceso se instaló en mi rostro una sonrisa sutil y hermosa que me acompañaba a todos lados. Por muy asustada que estuviera acudía sonriendo. Reconozco que no era forzada, era delicada y sí, me hacía sentir a salvo, en calma.


Dedicarnos una sonrisa nos acoge, nos abraza y nos ayuda a sostenernos.

Puede que haya muchos momentos que no sientas sonreír, sin embargo recuerda que es una herramienta muy poderosa para entregar a tu cuerpo un momento para que pueda empezar a regular el Sistema Nervioso y liberarse un poco del estrés.



Tip #7- Alejarnos de la queja.

Quejarnos nos lleva a poner el foco fuera, a darle el poder de cambiar nuestro estado de ánimo a algo que no se corresponde con nuestra expectativa, nos enreda en un bucle de juicio, culpa, resistencia, enfado, y enturbia la mente.


La invitación es a comenzar a agradecer.

Por todo, por lo que ya tenemos, por lo que queremos sintiendo la emoción de que ya está en nuestra vida, por los aprendizajes que nos regalan los sucesos, situaciones o personas con las que no estamos de acuerdo porque nos muestran aspecto de nosotros con los que nos sentimos heridos o en lucha.


Quejarnos no soluciona nada, nos mantiene con la mirada en el problema y ofuscados dando vueltas en bucle a eso que nos atrapa. Mira eso que te lleva a quejarte y empieza a preguntarte cómo podrías transformarlo. Si está en tu mano, haz algo diferente. Si no está en tu mano, mira si puedes tomar alguna acción para que, a quien le corresponda lo modifique. Si no suéltalo y empieza a observar qué puedes aprender de ello y agradece.


Sobre el agradecimiento y mi experiencia con él te compartiré próximamente.



Espero que estos 7 tips para cuidar tu energía cada día durante tu proceso oncológico te hayan servido para reflexionar, y te inspiren para ponerlos en práctica. Si crees que pueden resultar de ayuda a alguien que conozcas, compártelo.


Todo está en ti. Confía


Ana Martínez

La Magia de Volver a Ti



Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page